El buque de investigación oceanográfica ruso Yantar, la última embarcación internacional que estaba afectada a la búsqueda del ARA San Juan, puso fin a su participación en el operativo desplegado para hallar el submarino.
El Yantar partió en las últimas horas con destino al puerto de Montevideo para cargar combustible, luego hará tareas de reabastecimiento en Buenos Aires, y ya no regresará al área en la que se trata de localizar la embarcación desaparecida el 15 de noviembre último con 44 tripulantes a bordo.
La novedad fue comunicada por las autoridades de la Armada Argentina a los familiares de los tripulantes en la Base Naval marplatense. Ante esta noticia, Victoria Morales, madre de Esteban García, uno de los dos submarinistas tucumanos desaparecidos en el ARA San Juan, habló con "Buen Día" y contó sus sensaciones.
"Estamos desamparados, sin nada, pidiéndole a Dios que se apiade. Hace cinco meses que mi vida cambió. Nos tuvimos que mudar a Mar del Plata, y ahora nos informan esto", detalló.
La tucumana, indiganda, apuntó contra el Gobierno nacional por el “abandono”. "Tengo dolor, no bronca. A (Mauricio) Macri le pediría que piense en sus hijos. Y que ponga su firma para que puedan venir nuevas empresas para la búsqueda. Mi hijo y yo lo votamos y siento que nos abandonó, como al resto de las otras familias", comentó Morales.
"Mis hijo tiene dos pequeñitos que preguntan todos los días por su papá. A él (por García) todavía le hablo por whatsapp, le mando mensajes, me autoconvenzo que está vivo. Por eso trato de no ver no cosas en la tele ni en las redes; hay muchas hipótesis, pero no queremos ver nada; sólo queremos encontrarlos. Son 44 personasque están desaparecidas. El mar se llevó a mi hijo, ahora pido que nos devuelva", cerró.
El buque ruso, de 108 metros de largo y 17 de ancho que cuenta con un vehículo operado remotamente (ROV) para la exploración subacuática, se había sumado a la búsqueda en la última semana de noviembre.
Tras la partida del Yantar, ya no quedan buques extranjeros en el operativo de búsqueda. Los familiares reclaman ahora al Gobierno que contrate directamente a la firma estadounidense Servicios Electrónicos Acuáticos que cuenta con tecnología para barrer el lecho marino hasta 4.500 metros de profundidad.